Diagnóstico de la Enfermedad de Parkinson
Bibliografía: Chaná P. Editor. Enfermerdad de Parkinson. Santiago de
Chile: Internacional Medical Text; 2010.
He elegido esta bibliografía porque explica de manera
clara y sencilla los criterios que actualmente se utilizan para diagnósticar a
un paciente que padece la enfermedad de Parkinson.
La tríada
clásica de signos para comenzar el diagnóstico son: bradicinesia, temblor de
reposo y rigidez. La alteración de los reflejos posturales habitualmente no
resulta de utilidad en el diagnóstico inicial ya que, en general, es de
aparición más tardía y puede asociarse a parkinsonismos secundarios. Los signos
deben estar presentes al menos durante un año.
Los
criterios basados en la combinación de hallazgos clínicos aumentan la
especificidad del diagnóstico, sin embargo, la certeza diagnóstica sólo se
logra con la confirmación anatomopatológica. Se estima que con la utilización
de diferentes criterios clínicos estandarizados se alcanza un valor predictivo
positivo (VPP) de alrededor del 90%, con una sensibilidad de entre 67-90% por
neurólogos generales, mientras que un VPP del 98% y sensibilidad del 90% si el
diagnóstico se realiza por neurólogos expertos en trastornos del movimiento.
Los
criterios más reconocidos por la comunidad neurológica son los propuestos por
el Banco d Cerebros de Londres. Éstos se basan en observaciones y correlaciones
clínico-patológicos de un amplio número de casos.
Se
distinguen tres pasos para constituir el diagnóstico de EPI. El primero habla
de establecer criterios para el diagnóstico del síndrome parkinsoniano; el
segundo paso se refiere a considerar criterios que excluyen el diagnóstico, es
decir, que nos hacen sospechar de diagnósticos alternativos a la EPI y, por
último, se deben analizar los criterios que apoyan el diagnóstico de EPI, que
si bien no son signos cardinales y necesarios, el que estén presentes hace más
probable el diagnóstico.
Criterios
diagnósticos de la enfermedad de Parkinson idiopática.
Primer paso: establecer diagnóstico de síndrome
parkinsoniano.
Al menos uno
de los siguientes puntos:
- Bradiscinesia.
- Rigidez muscular.
- Temblor de reposo.
Segundo paso: criterios de exclusión para la
Enfermedad de Parkinson. La presencia de cualquiera de ellos excluye el
diagnóstico:
- Historia de accidentes vasculares a repetición con un cuadro de parkinsonismo instalado en escalera.
- Historia de traumas de cráneo repetidos.
- Historia de encefalitis.
- Crisis oculogiras.
- Tratamiento con neurolépticos al inicio de los síntomas.
- Más de un paciente con parkinsonismo en la familia.
- Remisión sustancial espontánea.
- Cuadro unilateral estricto por más de tres años.
- Parálisis Supranuclear de la mirada.
- Signos cerebelosos.
- Síntomas severos de disautonomía de presentación temprana.
- Presentación temprana y severa de demencia con alteraciones de la memoria, leguaje y praxias.
- Signo de Babinski.
- Presencia de un tumor cerebral o hidrocéfalo comunicante en estudio de neuroimágenes.
- Sin respuesta a dosis altas de levodopa descartando alteraciones de la absorción.
- Exposición a MPTP.
Tercer paso: criterios positivos que soportan en
forma prospectiva el diagnóstico de Enfermedad de Parkinson.
- Presencia de al menos tres de ellos para establecer el diagnóstico definitivo:
- Inicio unilateral.
- Temblor de reposo presente.
- Enfermedad progresiva.
- Persistencia de asimetría afectando más el lado por el que se inició la enfermedad.
- Excelente respuesta (70-100%) a la levodopa.
- Corea inducida por la levodopa (severa).
- Respuesta a la levodopa por cinco años o más.
- Curso clínico de diez años o más.
Relizado por Juan Diego Egido Riscos el 2/12/2012.
No hay comentarios:
Publicar un comentario